El servicio de mensajería instantánea más utilizado en el mundo dejará de ser de pago en las próximas semanas. Tampoco es que estuviéramos pagando mucho por él, ya que la tasa era de 0,89 euros al año, sin embargo, han sido muchas las críticas desde que empezó a cobrar esa cuota tras haber surgido como un servicio gratuito (excepto para los usuarios de iPhone). La decisión de empezar a cobrar una tasa anual se tomó a principios de 2013, en medio de una gran polémica, y ahora, menos de dos años después, la empresa retira la cuota porque “el enfoque no ha funcionado bien”, según indicó en su blog oficial.
«Muchos usuarios de Whatsapp no disponen de una tarjeta de crédito o débito y están preocupados de perder el acceso a sus amigos y familia después del primer año», explicó la aplicación de mensajería, añadiendo que «por ello, durante las próximas semanas, eliminaremos los pagos de las diferentes versiones de nuestra aplicación y Whatsapp no volverá a cobrarte por nuestro servicio».
Un factor clave para decidir suprimir el modelo de pago fue la compra de la compañía por parte de Facebook en 2014, cuando desembolsó 13.800 millones de euros para hacerse con la aplicación. A partir de ahora, Whatsapp buscará formar para hacer rentables sus más de 900 millones de usuarios, si bien la compañía ya ha descartado la idea de insertar publicidad. Parecer ser que está planteándose ofrecer servicios especiales a empresas, como puede ser incluir nuevas herramientas que permitan conectar usuarios con empresas y organizaciones.